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sábado, 29 de agosto de 2015

COME BACK


Tras una larga ausencia, he decidido retomar este blog.

Seguiré poniendo lo que en su día ponía, pero también pondré mis artículos publicados en otras webs o blogs.

Para ir abriendo boca os pondré como quedaron los grupos de la Champions League y la Europa League.









Nos leemos pronto!

jueves, 12 de enero de 2012

Equipos de Leyenda...SS Lazio 99-00




A pesar del éxito cosechado la campaña anterior (temporada 98-99) con el subcampeonato de Liga y la consecución de la extinta Recopa de Europa ante aquel gran Mallorca del "maldito de las finales" Héctor Cúper, e incluso la anterior a esta (temporada 97-98), en la que había ganado la Copa de Italia y la Supercopa de Italia, siendo subcampeón de la Copa de la UEFA (fue derrotado 3-0 por el Inter de Milán del gran Ronaldo Nazario), en el verano de 1999, nadie en Italia podía pensar que la Lazio iba a tocar el cielo aquella temporada.

El conjunto romano comenzó el año mostrando sus credenciales al derrotar, por 1-0, con gol de Marcelo Salas, al Manchester United en la Supercopa de Europa. Fue el epílogo de una exitosa novela.
Sergio Cragnotti

La Lazio se había convertido en los últimos años en un equipo temible. El presidente del club, Sergio Cragnotti (que años más tarde provocaría el derrumbamiento progresivo del club tras su salida de éste por estar implicado en diversos procesos judiciales por fraudes fiscales), se propuso a su llegada crear un auténtico imperio. Y lo consiguió utilizando su empresa privada, Cirio (dedicada a productos lácteos y conservas), como aval.
El magnate italiano llevó la marca a Sudamérica con el fin de abrir nuevos mercados.

El éxito de la firma sirvió para que Cragnotti, hábil en su estrategia, convenciera a algunos de los mejores futbolistas sudamericanos para recalar en la Lazio.
Así, a Almeyda y Marcelo Salas, pilares claves en el sistema de Eriksson, se sumaron aquella temporada Simeone, Verón y Sensini. Fueron la guinda de un pastel que se levantaba sobre la figura del mariscal Alessandro Nesta.


Chinaglia

La Lazio, hasta aquel entonces, era un equipo sin apenas historia en el Calcio, siempre a la sombra de los colosos transalpinos.
La única Liga que vestía sus vitrinas se conquistó en 1974, recordado por asuntos extradeportivos, ya que los integrantes de aquellla plantilla procedían de ambientes militares y presumían de una marcada ideología fascista.
Gigi Martini
Tomasso Maestrelli
Re Cecconi
El grupo estaba dividido en 2 clanes: el del delantero Chinaglia y el del defensa Gigi Martini. En el campo eran compañeros, fuera de él nunca cesaron las amenazas entre ambos bandos. Los futbolistas reconocieron que en el vestuario guardaban pistolas, navajas, escopetas o machetes, entre otras armas. La sangre nunca llegó al río gracias al entrenador, Tomasso Maestrelli, quien supo lidiar en muchas ocasiones con las violentas secuencias que se vivieron en aquella "jaula de grillos". La mayoría de aquellos futbolistas tuvieron un futuro turbio, teniendo gran trascendencia en el país transalpino la muerte del fantasista de aquel equipo, el mediocentro Re Cecconi, apodado "el ángel rubio". Cecconi entró en la joyería de un amigo gritando "¡Arriba las manos!" y fue disparado sin contemplaciones por éste, que no le vio el rostro al encontrarse de espaldas.


Sven Goran Eriksson
El conjunto romano, encumbrado por el ambicioso Cragnotti, y dirigido magistralmente por Sven Goran Eriksson, se situó en la cúspide del fútbol italiano en tan sólo un año. La Lazio, en su afán de reinar en la Serie A, empezó su andadura con buen pie, imbatido en las primeras 9 jornadas. En la décima llegó la gran prueba de fuego: el derbi romano. A pesar del buen estado en el que llegaba el equipo, la Roma pasó literalmente por encima. Delvecchio y Montella, ambos por partida doble, golearon en un clásico que hizo mucho daño, en el aspecto anímico, a la Lazio.
Pero el equipo se levantó y, salvo el inesperado tropiezo en Venecia, no volvió a caer en la primera vuelta del campeonato. A esas alturas ya se vislumbraba un duelo bipolar entre la propia Lazio y la Juventus; con la mitad del campeonato disputado, los turineses superaban por un punto al conjunto romano.

Mientras tanto, la Lazio avanzaba rondas en la Copa de Italia, gracias, entre otras cosas, a la gran profundidad de plantilla de la que disponía. El equipo contaba con dos jugadores de gran talla por puesto. Nesta era el capitán de una retaguardia colmada de futbolistas con gran experiencia como Sensini o Mihajlovic. En el centro del campo, Almeyda y Simeone ponían la brega y el trabajo, y Nedved, Stankovic o Verón, la magia. Arriba, pura dinamita. Boksic y Salas comandaban una delantera que también contaba con grandes actores secundarios. Simone Inzaghi, Ravanelli, que se incorporó en el mercado invernal, y Mancini, que apuraba sus últimas dosis de fútbol, tuvieron un papel relevante en el ejercicio. Éste último se convirtió. por expreso deseo de Eriksson, en jugador-entrenador aquella temporada.

La segunda vuelta siguió el guión de la primera. El club romano se mostró sólido pero, en la jornada 26, la Juventus de Zidane le sacaba 9 puntos. Dos fechas más tarde, después de ganar el derbi de vuelta a la Roma y la Juventus caer, se enfrentaban en el duelo que, a la postre, dirimiría el título.
La Lazio dio un golpe de autoridad al ganar en Delle Alpi con un solitario gol de Simeone. A falta de 6 jornadas, la diferencia era de 3 puntos. Un pinchazo en Florencia dejaba al conjunto romano sin apenas opciones, pero aquel plantel se caracterizó por levantarse cada vez que se caía.
El campeonato se decidió en la última jornada. La Lazio llegaba con un punto de desventaja a la cita, y la Juventus tenía un partido fácil a priori. Contra todo pronóstico, la Juve cayó derrotada ante el Perugia y la Lazio, ante más de 80.000 personas en el Olímpico de Roma, se alzó con el segundo título de su historia al vencer a al Reggina.


3 días más tarde, ante el Inter de Milán, en San Siro, la Lazio ganó la Copa de Italia, y consiguió un doblete histórico en la temporada de sus 100 años. Era el cuarto trofeo del equipo en 2 temporadas. El cénit del imperio "lazial" en su centenaria historia.

El 11 habitual del conjunto lazial lo formaban: Marchegiani (Ballotta); Negro (Favalli), Nesta (Sensini), Mihajlovic (Fernando Couto), Pancaro (Gottardi); Matías Almeyda (Sergio Conceiçao), "Cholo" Simeone (Iván de la Peña), "Brujita" Verón (Lombardo), Nedved (Dejan Stankovic); Marcelo Salas (Mancini - Ravanelli) y Boksic (Simone Inzaghi).

Brujita Verón
Matías Almeyda
Alen Boksic

Sergio Conceiçao
Fernando Couto
Iván de la Peña
Mancini
Marchegiani
Sinisa Mihajlovic
Pavel Nedved
Negro
Alessandro Nesta

Pancaro

Ravanelli

Marcelo Salas

Sensini

Cholo Simeone

Simone Inzaghi


lunes, 26 de diciembre de 2011

Isaac Cuenca



A la hora de hablar de Isaac Cuenca hacerlo simplemente de su descaro y atrevimiento es quedarse corto. Con apenas 5 partidos en la élite ha mostrado mucho más.
En la rueda de prensa tras el partido ante el Levante, Pep Guardiola habló sobre Cuenca y la mayoría de medios optaron por sacar a relucir el comentario sobre su aspecto en lugar de quedarse con que Pep destacó una de sus virtudes por encima de todas y no fue ni el regate ni el centro ni el remate.

Decía Pep que Cuenca sabe estarse quieto por el bien de los demás, una reflexión que dice mucho más de lo que parece. Si este chico está llegando a donde tantos otros no lo hacen es por su inteligencia.

Nacido en Reus, el 27 de abril de 1991, Isaac Cuenca se ha convertido en la última apuesta de futuro de Pep Guardiola. Un técnico que convirtió al joven futbolista en el 18º canterano en debutar a sus órdenes (el 19º fue el juvenil Gerard Deulofeu) el pasado 19 de octubre, en el encuentro disputado frente al Viktoria Plzen en la fase de grupos de la Champions League, y que, hasta la fecha, ya le ha utilizado durante 391 minutos.

La cifra evidencia la confianza que Guardiola (que dio la alternativa a Cuenca motivado por las bajas de los ya recuperados Alexis Sánchez y Pedro Rodríguez) ha depositado en un jugador vertical, rápido y dotado de una excelente técnica y una facilidad suprema para el regate. Pese a ser diestro, Cuenca utiliza bien la izquierda y se ha convertido en una opción versátil y de garantías para el técnico de Santpedor.

Hasta encandilar a Guardiola, sin embargo, Cuenca ha vivido, pese a su corta edad, un largo peregrinaje en el que ha hecho gala de su tesón, su esfuerzo y su enorme capacidad de sacrificio.
Isaac Cuenca, de pie, el primero a la derecha.

Con 7 años empezó a jugar en el Unió Barri Juroca de Reus, el equipo de su colegio. Ya a esa edad despuntaba y fue convocado para un torneo de verano con una selección de Reus, siendo el mejor jugador del torneo, y con 9 años el Espanyol lo fichó.
Allí se convirtió en una de las joyas del fútbol base, pero a los 11 años, Cuenca cambió el Espanyol por el Barça, donde siguió creciendo hasta que con 14 aparecieron los sinsabores y las pruebas de fuego para un jugador dotado de una enorme fortaleza mental.


Cuenca con el Espanyol
Su primera decepción, curiosamente, la vivió en el Barça que, ahora, lo ha presentado a la élite. El club azulgrana le fichó dos años después de su aterrizaje en el Espanyol y en las categorías inferiores culés se hartó a calentar banquillo. La titularidad era territorio de Gai Assulin, ahora propiedad del Manchester City y recientemente cedido al Burnsley ( equipo de la Championship inglesa), y la impotencia se apoderó de un Cuenca que acabó estancándose, tampoco ayudado por su físico, algo más endeble que los demás chicos de su edad.



Isaac Cuenca jugando en el Santas Creus
Cuenca sólo quería jugar y jugar, y ante tal situación, el jugador tuvo la valentía de abandonar el club azulgrana para buscar minutos en el Santas Creus de su Reus natal. Allí se reencontró con las buenas sensaciones, demostrando su clase tanto dentro como fuera del campo, donde era habitual verle con una pelota haciendo malabarismos con ella, yendo de casa al colegio dando toques con la pelota sin que esta tocara el suelo.

A los 16, volvió a Barcelona para enrolarse en las filas de La Damm, la exitosa escuela de fútbol base recaptadora de jóvenes talentos, de donde han salido jugadores como Álvaro Vázquez (Espanyol), Sergio García (Espanyol), Dani García Lara (ex- Real Madrid, Barça, Zaragoza, Mallorca o Espanyol), Curro Torres (ex- Valencia), Víctor Vázquez (Club Brujas), Sergio Tejera (Mallorca) o el entrenador del R.C. Celta de Vigo, Paco Herrera.

Isaac Cuenca con la Damm, jugando contra el Barça de Oriol Romeu.

Tras un año en el club cervecero, y un grandísimo trabajo realizado, el Barcelona volvió a interesarse en él (también lo hizo el Espanyol) y Cuenca emprendió una segunda etapa en Can Barça no exenta de dificultades.

El año pasado, el ex técnico del Barça B, Luis Enrique, puso en tela de juicio su capacidad para brillar en el segundo equipo barcelonista y Cuenca fue inteligente (y valiente) al emigrar al Sabadell, donde actuó la temporada pasada en calidad de cedido. En el equipo arlequinado, el extremo catalán completó un curso excelso y sus aportaciones fueron clave para que el Sabadell certificara su ascenso a la Liga Adelante.
Cuenca en el Sabadell.

Pero Cuenca soñaba con jugar en el Barça, donde cada día en su habitación miraba los recortes y los pósters de sus ídolos pensando en que algún día el aparecería con ellos en las fotos.
Sólo unos meses después la imaginación se hizo realidad. Guardiola se lo llevó a la pretemporada y se fijó en el, hasta haciéndolo debutar en el primer equipo. Pero Isaac es pura humildad y sabe que su rol es estar en el filial blaugrana y que trabaja para ganar con ellos, aunque Pep confía en él y ahora, el exilio ya forma parte del pasado. ¿Quién le iba a decir cuando se fue al Sabadell que quince meses después llevaría tres asistencias en Champions League?

Cuenca es un extremo a la antigua usanza: prefiere jugar en su banda y no a pierna cambiada, un uso que ha ganado tanto terreno que ha arrinconado a la antigua estirpe de bailarines de la línea de cal. Su salida natural es para fuera y completa su talento para el dribling con la de centrar muy bien en carrera, una capacidad en la que los españoles somos inferiores a los ingleses y los alemanes. Además, tiene rigor táctico para mantener su posición cercana a la línea de cal, consciente de que le hace más bien a su equipo abriendo el campo y esperando que yéndose al centro a buscar la pelota.

Sabe esperar, quedarse en su zona, ensanchando el campo, dando amplitud al frente de ataque y obligando a que el lateral rival se tenga que quedar a vigilarle y no se dé tantas alegrías en ataque (algo vital en el 3-4-3 de Guardiola: que el rival no logre superioridad para atacarles por banda; recordemos cómo sufrió el Barça con el flanco izquierdo del Valencia).

En el tema de esperar hay una gran diferencia entre hacerlo por obligación o por entendimiento. 

El que lo hace obligado, por orden del entrenador, sin gustarle, acaba pensando demasiado en sí mismo cuando por fin le llega la pelota. El que lo hace porque comprende que es lo mejor, sigue pensando en el equipo cuando le llega la pelota y, en consecuencia, suele escoger con más acierto cuándo encarar, cuándo centrar, cuándo jugar de primeras…

Cuenca no será el que mejor regatea, ni el que más corre, ni el que mejor centra, ni el que más salta. Tampoco lo eran, ni lo son, Xavi, Iniesta, Fàbregas, Pedro, Thiago
En el fútbol, por más físico que se ponga, el fútbol seguirá siendo por siempre jamás de los jugadores inteligentes. Como Isaac Cuenca.



  • Isaac Cuenca haciendo virguerías con la pelota cuando aún era un chavalín.





  • En su etapa el año pasado con el Sabadell.





  • Su época como canterano azulgrana.





  • Una delicia que dejó en el partido contra el Zaragoza.





sábado, 24 de diciembre de 2011

Qué fue de...? Nottingham Forest



El Nottingham Forest nació en 1865 como una alternativa a su rival vecino, el Notts County, que fundado en 1862 es el equipo más antiguo que aún sobrevive.

El Forest formó parte de la Primera División Inglesa durante sus primeras décadas de vida, pero en los años 20 comenzó una largo periodo de descomposición que le llevó hasta la tercera división. Pero su época dorada empezaba en un año, 1975, que se encontraba en la segunda división del fútbol inglés. Y toda época doraba lleva un nombre propio: Brian Clough.

El mítico entrenador inglés (estuvo 18 temporadas en el Forest) traía consigo una trayectoria inmaculada, tanto de jugador como de entrenador. En 1977 consiguió devolver al Nottingham a la élite.

En su regreso fichó a jugadores de la talla de Peter Shilton o Martin O'Neill, que formaban la base del equipo junto al defensa central Kenny Burns, el centrocampista McGovern y el delantero Trevor Francis. Contra todo pronóstico, el Nottingham se alzó con el título de Liga por primera (y única vez) en su historia. Un recién ascendido dio la campanada. También ganó la League Cup frente al Liverpool. Pero lo mejor estaba por llegar.

La afición del Forest esperaba impaciente por asistir al debut en competición internacional de su equipo. Y otra vez se superaron todas las expectativas. El equipo de Clough eliminó a Liverpool (campeón de las 2 ediciones anteriores), AEK de Atenas, Grasshoppers y Colonia hasta llegar a la final, disputada en el Olímpico de Munich.
Trevor Francis anota el gol de la victoria.
Un gol de Trevor Francis rematando un centro desde la izquierda sirvió para derrotar al Malmö FF (Campeón de Suecia) y proclamarse campeón de la Copa de Europa. También revalidaría su título de la League Cup y quedaría subcampeón de Liga.
Era mayo del 79.

Un año después el Forest ganó la Supercopa de Europa y disputó la competición como vigente campeón y volvió a dar la sorpresa. Esta vez los rivales fueron el Östers IF, Pitesty, Dinamo de Berlín y Ajax.
Forest - Hamburgo
En la final, jugada en el Santiago Bernabéu , venció al Hamburgo del Balón de Oro Kevin Keegan por idéntico resultado al de la final del año anterior. John Robertson marcó el gol de la victoria tras un pase de Birtles. Fue la culminación de una historia de ensueño, inimaginable pocos años atrás.

A pesar de este trienio mágico para el equipo de Nottinghamshire, mantener el mismo nivel era misión imposible al no ser uno de esos equipos denominados "grandes", estando en la élite hasta que la inercia ganadora dejó de acompañarles.
Siguieron surgiendo buenos jugadores como Stuart Pearce, Roy Keane o Ian Wright, pero con el comienzo de la década de los 90, el Nottingham Forest sufrió innumerables crisis deportivas hasta tocar fondo en 2005, cuando descendió a la League One (la Tercera División) por primera vez en más de 50 años..

Ahora, en la Championship (equivalente a Segunda) pelea por recuperar el lugar perdido, aunque esta temporada parece que no va a ser posible el ascenso ya que se encuentra 3º por la cola con 21 ptos. a 23 ptos. del líder, el Southampton.



Jugadores destacados:

  • Trevor Francis. Delantero del trienio dorado del Forest. Después jugaría en el Manchester City, Sampdoria, Atalanta o Glasgow Rangers. Internacional con Inglaterra en 52 ocasiones (12 goles).
    También fue entrenador del Queen Park Rangers, Sheffield Wednesday, Birmingham City y Crystal Palace. Ahora está trabajando para Al Jazeera Sports como analista experto.
    Fabio Capello dijo de él que fue el mejor jugador inglés que jugó en la Serie A.


  • Andy Cole. Prolífico delantero inglés que pasó por Arsenal, Newcastle United o Manchester United entre otros, para retirarse en 2008 en el equipo de su ciudad natal, el Forest.



  • Jermaine Jenas. Centrocampista del Tottenham Hotspur, que comenzó su carrera en el equipo de su ciudad, el Forest, para después fichar por el Newcastle United por 5 millones de libras.



  • Roy Keane. Uno de los mejores jugadores irlandeses de todos los tiempos se inició en el Forest, para pasar posteriormente al Manchester United donde permanecería 12 temporadas hasta retirarse en el Celtic de Glasgow. Fue entrenador del Sunderland y del Ipswich Town.


  • John McGovern. Central escocés, capitán del Nottingham, que además jugó en el Derby County y el Bolton Wanderers, del que también fue entrenador.

  • Stuart Pearce. El defensa inglés, tras despuntar en el Forest durante 8 temporadas, jugaría posteriormente en el Newcastle United, West Ham y Manchester City. Actualmente es el seleccionador Sub-21 de Inglaterra

  • David Platt. El fantástico centrocampista inglés se retiró en el Nottingham donde fue jugador-entrenador, tras haber pasado por Aston VillaBari, Juventus, Sampdoria y Arsenal. Actualmente es ayudante técnico del Manchester City.


  • Teddy Sheringham. El fantástico delantero inglés despuntó en el Nottingham, previo paso por el Milwall, y posteriormente por el Tottenham Hostpur, Manchester United o West Ham. Actualmente es un reconocido jugador de póker.

  • Peter Shilton. El mítico portero inglés jugó el trienio dorado del Forest, para después pasar por otros muchos equipos hasta jugar 1390 partidos en el fútbol inglés y 125 internacionalidades con Inglaterra, llegando a jugar el Mundial de Italia '90 con 40 años. Se retiró a los 48 años de edad en el Leyton Orient.




  • John Terry y Aaron Ramsey. El gran central inglés del Chelsea y el prometedor centrocampista galés del Arsenal  jugaron cedidos por sus respectivos clubes al Forest.





Curiosidades sobre el Nottingham Forest:
  • El color rojo de sus uniformes proviene de la admiración que por aquellos tiempos había en el Reino Unido hacia los famosos "camisas rojas" del revolucionario Giuseppe Garibaldi. Unos años más tarde, un directivo de un equipo italiano fue a Nottingham buscando ayuda para conseguir nuevas camisetas, y en lugar de recibir las rojas del Forest recibió las camisetas a rayas blancas y negras que portaba el equipo rival de la ciudad, el Notts County.
    El directivo era un representante de la Juventus de Turín.
  • Aunque mucha gente no lo sabe, la conocida canción "We 've got the whole world in our hands" fue el himno oficial del Forest a raíz de esos tres años en los que fue el mejor club del mundo.